Mira que testimonio tan lindo, que mujer tan sufrida y como Dios usa su desgracias para luego transformarla en bendición, escuchalo hasta el final y te bendecira...
Que les parece si ahora nos acompañan hasta Tiquicia, Costa Rica y vamos a conocer la historia de Rodrigo y Marta. A ella se le enseño desde muy pequeña que cuando el dinero se acaba, bueno pues se acaba y no hay más. Pero él aprendió a manejar...